domingo, 27 de enero de 2008

Un final de altura...

Dudaba entre varios temas para escribir la última entrada del blog, pero finalmente me he decidido por éste, por todo el revuelo que monta y porque al fin y al cabo...es espectacular, y también porque supongo que me apetecía poner una foto del gran Kobe Bryant.

Me estoy refiriendo al All Star de la NBA (que se celebra el fin de semana del 15 al 17 de febrero). Junto con la Superbowl de la NFL y las finales de la propia NBA, yo diría que es uno de los eventos deportivos que más expectación crean en todo el mundo, de hecho se retransmite en la mayoría de países.

Mucha gente pensará que un All Star es un partido que se juega entre los mejores jugadores de la liga y poco más, pero en realidad es mucho más que eso. Los quintetos titulares de cada conferencia (Este y Oeste) los eligen los telespectadores por medio de una votación que se abrió hace unos 2 meses, y a día de hoy con las votaciones cerradas se han alcanzado casi los 20 millones de votos. Hay países a los que ya les gustaría que la participación en sus elecciones fuera como la de un All Star.

Pero además del partido en sí hay más cosas: está el partido de los jugadores novatos contra los jugadores de segundo año (Rookies vs. Sophomores), el concurso de habilidades, el concurso de tiro, el concurso de triples y como no el concurso de mates. Este último es el evento que más repercusión tiene en el mundo simplemente por su espectacularidad, aunque a mí personalmente me resulta bastante penoso ver a los presentadores de deportes de Antena3 o Telecinco comentando estos concursos...y equivocándose en los nombres de los participantes. Otro de los puntos interesantes del fin de semana de las estrellas lo pone el partido entre famosos, aunque por desgracia no tiene excesiva repercusión fuera del continente. Lo mismo pasa con el All Star de la D-League.

Bueno, el caso es que aparte de todo lo espectacular del evento hay una parte que llama menos la atención, me refiero al NBA Cares. NBA Cares es una asociación de la liga que intenta ayudar a los más desfavorecidos, especialmente a los niños. Así, esta asociación se dedica a llevar a las estrellas de la NBA para montar partidillos de baloncesto entre los chavales de países subdesarrollados además de hacer los donativos pertinentes. Esto es lógico si tenemos en cuenta que hay un gran número de jugadores de la NBA que vienen de unos orígenes más que humildes.

Otro de los temas interesantes del All Star de este año es que tiene lugar en New Orleans. Todo el mundo recuerda que hace más o menos un par de años New Orleans sufrió las devastadoras consecuencias del huracán Katrina, lo que hizo que la franquicia asentada en New Orleans, los Hornets, pasarán a jugar sus partidos en Oklahoma. Un par de años les ha costado reconstruir el pabellón de los Hornets y celebrar allí un evento como este que demuestra que en la ciudad ya no queda ningún resquicio de la tragedia.

Aparte del tema baloncestístico, en un All Star también hay tiempo para la fiesta, vaya si lo hay. La propia NBA organiza las llamadas JAM Sessions en las que este año colabora Adidas (la marca que viste a todos los conjuntos de la liga) que vienen a ser una mezcla de fiesta con baloncesto, es decir; buena música y espacios para jugar. Uno de los puntos fuertes de estas JAM's es la utilización de camas elásticas para que la gente 'machaque' el aro como si fueran estrellas de la NBA.

Obviamente, un evento como este mueve muchísima gente y sobre todo mucho famoseo. De hecho, además de las fiestas oficiales se dice que durante el All Star se suelen celebrar unas 20 feistas por noche, unas de ellas para cualquiera y otras algo más privadas. Con toda esta fiesta es lógico que el famoseo típico estadounidense se traslade para allí siendo habituales gente como Jack Nicholson, Michael Jordan y gran parte de raperos famosos como Jay Z o Puff Daddy, famoso por viajar con sus 3 o 4 Rolls Royce a todos los All Star.

En definitiva, un All Star es un evento espectacular que mueve a millones de personas en parte porque la NBA ha sabido venderse muy bien en Estados Unidos y fuera del continente americano, así lo demuestran los llenos absolutos que sufren los pabellones a los que se desplazan algunas franquicias en el denominado NBA Europe Tour de todos los años.

Los americanos saben montar espectáculos como estos como nadie, estaría bien que en Europa tomaramos un poco de ejemplo de ellos en cuanto a organización de estos eventos se refiere, porque por si a alguien se le ha olvidado...¿qué selección es la vigente campeona del mundo? Pues sí, España...y ni siquiera somos para acoger una Final Four de la Euroliga. En fin, supongo que se tratará de mentalidades diferentes...

Hasta más ver.